Nostalgia mágica

Nostalgia mágica

Cerraba la puerta y atrás quedaban tantos y bellos recuerdos que vistieron mi alma de una nostalgia mágica.

La respiración se entrecortaba y lucia una altivez muy inusual. Comenzó un viaje que me trasporto a una llanura inhóspita, los besos sentidos en el corazón se mezclaron con la candidez de los esteros plagados de la inmensidad del rostro de mujer.
Pensamientos entrecortados y luego continuos, marcaron el paso que el camino me mostraba, no había rumbo, ni bitácora programada, solo la ansiedad de encontrar ese rostro de mujer que me atormentaba. Tenía pecas, pelo azabache y una mirada progresiva que me guiaba.
Súbitamente los recuerdos desaparecieron, sin explicación lógica. Estaba perdido en la inmensidad de los esteros, la llanura no tenia limites en el horizonte. Corría, corría y mientras mas lo hacia, se ampliaba la dimensión de los limites del horizonte. Se había perdido la magia.
Cansado y casi sin aliento un árbol fue el soporte necesario, de pronto quise cerrar los ojos y reencontrarme con mis recuerdos, no pude, mi mente no encontraba el punto de regreso a la belleza de ese rostro difuso que me quitaba la tranquilidad.
El viento traía una sonoridad profusa, sin notas musicales, cargada de sentimientos explícitos de castidad. Honrosa representación de inocencia.
El sueño me aparto de la realidad y las imágenes llegaban sin simetría, descompuestas en lo absurdo, materializadas en mi imaginación. No había rostros, solo pasajes de confusión posesos de mucha soledad. Al despertar mire al cielo carente de estrellas e inundado de nubes que acentuaban más mi nostalgia mágica