miércoles, abril 24, 2024

Primeras y probablemente las últimas palabras escritas del 2014 a través de Facebook.


Hoy jueves 4 de enero, es un día especial, está cumpliendo año mi hermano Alfredo mi compañero de toda la vida, alguien que ha luchado por vivir pero de una manera muy extraña. Hoy tenía planes y tuve que regresarme en mi mente de los mismos. Camino al Hospital (Instrucciones del médico, NO CLINICA, Hospital) a mi lado derecho lo veía y fueron muchos los pensamientos que me asaltaron en mi mente ante situaciones de este tipo, solo se piensa en una sola cosa.


Del lado izquierdo observe un tráfico ENORME, de carros con gente  muy alegre que se dirigían al Litoral Central (Playa), de inmediato esos pensamientos que me habían asaltado se fueron diluyendo y recuerdos del pasado me envolvieron y alivianaron la carga.  De inmediato pensé que el tráfico con la persona correcta alivia la incomodidad del tráfico, cuanto me hubiera gustado estar del lado izquierdo,  alegre en ese tráfico vehicular y no camino al hospital a una nueva lucha de mi hermano por la vida. 


Ya en el hospital mis sobrinos casi a cuesta sacaron a mi hermano de la camioneta para que los médicos lo estabilizaran, de ahí a rodar con el vehículo ya a mi lado Erika quien  me advirtió de regreso a la casa, el trafico que habíamos observado. Erika atino a decirme que la gente va a la playa hoy ya que el lunes trabajan y quieren verse bronceados, no sé si esa sea la razón de las personas que hacen esas largas colas, en todo caso me hubiese gustado estar del lado del trafico, paradójicamente sentí muy adentro de mi, que esa persona de la cual aprendí bastante, de seguro estaba atorada en ese tráfico y cuando siento algo es casi seguro que no me equivoque. Mis respetos a usted, hermano de farras. 


Ya en la casa, después de llevar la muestras (a una clínica privada, ya que NO HAY MATERIAL EN EL HOSPITAL o el laboratorio estaba cerrado) de algunos exámenes que habían que realizarle a mi hermano regresamos a casa. Erika en el trayecto me dijo que ya no habrá celebración de cumpleaños para mi hermano, la melancolía y la tristeza fue grande. Erika su nuera tenía toda la razón, Alfredo no celebrará este año su cumpleaños. 


Al poco rato de estar en la casa, tome algunas cosas y me fui a un parque, me senté en la grama toda la tarde,  no hubo forma de descansar, pensamientos iban y venían. Me hice una pregunta, ¿Ricardo cuanto tiempo tienes que no te sentabas en la grama de un parque? De inmediato me dije, NO SE, años muchos años. Observaba los colores de la naturaleza y no podía creerlo, aun siendo agrónomo y seguro tengo repuestas lógicas, en ese momento de encuentro con la grama se me nublo el alma, y la infancia se me vino encima sin preguntarme si podía hacerlo. Veía niños y niñas, correr, gritar, jugar, la felicidad que trasmitían era maravillosa, cuanto no hubiera dado, por cambiar de lugar con ellos, no por ser niño nuevamente, sino para tener un rato de felicidad, seguro alguien pensaría que estaba loco, pero me eche a rodar por la grama. Solo quiero más ratos de felicidad, creo tengo derecho a eso, no pido mucho ante la responsabilidad que no pedí y hoy tengo a cuestas. 

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