El amor de mis nietos
José y Juan son hermanos
Miro a sus ojos y desprenden una luz
de amor entrañable José y Juan mis nietos
su adoración no conoce límites
su pasión es eterna.
de amor entrañable José y Juan mis nietos
su adoración no conoce límites
su pasión es eterna.
José y Juan son hermanos
El llanto de uno es secado por la tristeza del otro
las palabras de aliento cubren el dolor mutuo
innatos se regocijan y se estrechan de las manos
para caminar por el sendero del amor.
las palabras de aliento cubren el dolor mutuo
innatos se regocijan y se estrechan de las manos
para caminar por el sendero del amor.
José y Juan son hermanos
Están unidos desde el corazón, es la génesis hecha
y trasmutada en la comprensión de convivencia
son espontáneos, fraternos, ternura transformadora
y silente solo conocida por ellos en su complicidad.
y trasmutada en la comprensión de convivencia
son espontáneos, fraternos, ternura transformadora
y silente solo conocida por ellos en su complicidad.
José y Juan son hermanos
José tierno, abstraído y desprendido,
Juan bañado en cariño, metáfora abierta
en la composición misma de un verso
que no conoce la prosa.
Juan bañado en cariño, metáfora abierta
en la composición misma de un verso
que no conoce la prosa.
José y Juan son hermanos
El vínculo de su filiación va más allá de la
interpretación, nace en el vientre de su amada madre
hilo invisible que solo ellos pueden entender
cuando las montañas se abrazan y permanecen estáticas
ante la mirada imberbe de quien los observa.
interpretación, nace en el vientre de su amada madre
hilo invisible que solo ellos pueden entender
cuando las montañas se abrazan y permanecen estáticas
ante la mirada imberbe de quien los observa.
José y Juan son hermanos
Aprenden de la vida agarrados de la mano,
de vestimentas y juguetes idénticos, armoniosos
y felices desprenden rayos de paz y felicidad,
comparten su inocencia y se consuelan ante el
llamado de atención.
de vestimentas y juguetes idénticos, armoniosos
y felices desprenden rayos de paz y felicidad,
comparten su inocencia y se consuelan ante el
llamado de atención.
José y Juan son hermanos, mis nietos
la bendición a la soledad, que no pedí tener
la canción que no demande entonar
el aprendizaje que no soñé tener
la lluvia que no extraño sentir
las palabras que no quise escribir
la fortaleza que no exigí poseer
el amor que no siento merecer
la pasión que no implore
la vida que no desee prolongar
la risa, la esperanza y la fe perdida
Mis nietos son lo más maravilloso
que me ha tocado conocer,
un reencuentro con el amor.
José y Juan desde el amor infinito
a la paz controlada.
Gracias. la bendición a la soledad, que no pedí tener
la canción que no demande entonar
el aprendizaje que no soñé tener
la lluvia que no extraño sentir
las palabras que no quise escribir
la fortaleza que no exigí poseer
el amor que no siento merecer
la pasión que no implore
la vida que no desee prolongar
la risa, la esperanza y la fe perdida
Mis nietos son lo más maravilloso
que me ha tocado conocer,
un reencuentro con el amor.
José y Juan desde el amor infinito
a la paz controlada.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario