con cada latido que abraza el momento,
con la pasión que despierta en tus manos
cuando tocas el mundo con sentimiento.
se vuelca entero sin medida ni cuenta,
porque amar con la vida es entregarse
como lluvia que riega y alimenta.
Sonríes con el alma,
con esa luz que nace desde adentro,
que trasciende los labios y se alza
como estrella en el firmamento.
Tu sonrisa no es gesto solamente,
es el eco del ser que se regocija,
es el brillo profundo que emerge
cuando el alma en su gozo se cobija.
Amas con la vida, sonríes con el alma,
dos fuerzas que danzan en armonía,
haciendo de ti un verso que camina,
una canción que llena de alegría.
Porque quien ama así, quien sonríe así,
convierte cada día en poesía,
y deja en cada paso que da al mundo
la huella luminosa de su esencia divina.